La reflexología podal ofrece varios beneficios, como la reducción del estrés y la ansiedad, el alivio del dolor, la mejora de la circulación sanguínea y la estimulación del sistema inmunológico. También puede mejorar la calidad del sueño, desintoxicar el cuerpo y ayudar al equilibrio psico-físico.
La reflexología podal se utiliza como método diagnóstico alternativo al aplicar presión en zonas reflejas de los pies que se corresponden con órganos, sistemas y áreas del cuerpo. Aunque no es, ni sustituye un diagnóstico médico.